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Cuando un invitado se ofreció voluntariamente a fregar los platos después de la cena,el Maestro le preguntó:
-«¿Estás seguro de que sabes hacerlo?»
El hombre protestó enfáticamente que lo había hecho toda su vida.
Y el Maestro le dijo:
-«No dudo de que seas capaz de dejar los platos limpios. Lo que dudo es que seas capaz de fregarlos».Y ésta es la explicación que más tarde dio a sus discípulos:
-«Hay dos maneras de fregar los platos: una consiste en fregarlos para dejarlos limpios; la otra, en fregarlos para fregarlos».
Y, como todavía no quedaba claro, añadió:
-«La primera acción es una acción muerta, porque tu mente está fija en la idea de dejar los platos limpios; la segunda es una acción viva, porque tu mente está donde está tu cuerpo»
UN MINUTO PARA EL ABSURDO.
Trozos Escogidos
Anthony de Mello
algunos seres humanos no encanta fregar........ pero fregar al projimo.
ResponderEliminarbesos
Me encanta Anthony de Mello :)
ResponderEliminarCierto Alma, no tenemos ni idea de convivir.
ResponderEliminarAnthony de Mello fue un hombre de una gran sensibilida. Aún me acuerdo cuando les leaía algunas cosas a los niños de su su libro "Las flores del bien"
Gracias por vuestros comentarios