Es bueno tener en cuenta estos consejos. Mi experiencia a lo largo de muchos años como monitora de Escuela Padres y sobre todo como madre, me han confirmado que solo podemos enseñar desde la coherencia. No podemos tratar de educar valores y normas si hacemos todo lo contrario.
"No vale ya lo de comerás huevos cuando seas mayor"
Hola Katy!! Coincido plenamente amiga. Si no se enseña con coherencia los resultados no van a ser los esperados. Y los valores deben vivirlos desde su hogar. Vale más una acción que mil palabras confusas y sin sentido.
ResponderEliminarFeliz jueves!!
Besossssss
Hola Gabriela, cada vez estoy más sendsibilizada con la educacion. Lejos de apartarla de la mente me preocupan más los jóvenes. Buena frase lo de que vale más una acción que palabras confusas.
ResponderEliminarBesos
Muy bueno, Katy. Me ha hecho gracia el final, porque mi padre lo decía.... pero yo salí rebelde porque no lo entendía :).
ResponderEliminarBesos.
Jajajaja, yo creo que esa era la tónica decirlo en palabras suaves en vez de decir haces esto por c.... :)
ResponderEliminarTodos tenemos una edad en laas que que damos todo por sabido y entendido. Normal, es que si no seríamos de plático o madera. Seguro que a medida que cumplomos años entendemos algo más.
Besos
Hola Katy:
ResponderEliminarUno generalmente es el resultado de lo que le trasnmitieron, aprendió y vivió. En ese sentido, muchos padres deberían pasar por estas escuelas de valores. Lo malo que muchos hacen "pellas" o se fuman la clase.
Un beso
Cuanta razón tienes Fernando, no se puede tomar a la ligera la formación de los chicos. Padres y profesores deberían estar unidos y colaborar mutuamente en este empeño. Pero se pasan la patata caliente unos a otros y asi van las cosas.
ResponderEliminarUn beso
Hola Katy:
ResponderEliminarCuánta razón tienes. El ejemplo es el mejor de los consejos. Hay que estar siempre con ellos: corrigiendo, queriendo, reprendiendo...qué te voy a contar.
Además, como bien decís, es primordial el acuerdo entre padres y profesores. Un abrazo.
¡Ah! No recuerdo haber comido huevos nunca. Es cierto.
Hola Rafa, los padres de hoy confunden amor con permisividad. Me da pena que lloren, por eso les compramos todos los caprichos. ¡ Nos da pena regañarles!¡Pobrecitos si son tan pequeños!. Y los niños se lo saben todo abusan y cuando se quieren dar cuenta los padres ellos mandan en la casa y la autoridad de los padres por el suelo.
ResponderEliminarUn abrazo